Helios puede ser la cadena de cines más grande de Polonia, pero eso no significa que ignore a sus clientes más pequeños. Sus actividades para niños y jóvenes adultos no son, por ejemplo, como el típico club de cine infantil -un lugar donde dejar aparcados a tus hijos mientras vas de compras-, sino que se dedican a hacer algo extraordinario y que incluye ayudar a que los niños tomen conciencia de un mundo en el que la información está presente de forma constante, pero eso no significa que sea cierta.

Dales un motivo

AVenue pudo hablar con Robert Kaczor, director del departamento de proyectos especiales de Helios, sobre sus proyectos Theme Cinema, Junior Theme Cinema y Film Academy, tres ramas de un mismo programa íntegramente dedicado a las audiencias más jóvenes.

«Ver películas en el cine no es un plan que surja de forma evidente para las audiencias más jóvenes”, explica Robert. “Los chavales pasan su tiempo en las redes sociales, en internet, viendo vídeos en YouTube y disfrutando de intereses únicos como el K-pop y el anime. Nuestros proyectos familiarizan a los chicos y chicas de estas edades con el cine o los conciertos proyectados en las salas de cine, y de esta manera eligen ir al cine de forma consciente y cuando se les da un motivo para ello».

Pero esto no se trata únicamente de un plan comercial. Desde luego, si ahora no hay audiencias jóvenes, no habrá audiencias adultas en el futuro, así que introducirles en el mundo del cine, la asistencia a salas y enseñarles lo que la proyección moderna es capaz de hacer tiene sentido empresarial. No obstante, Robert reconoce que los cines son lugares únicos, dado que las películas pueden transmitir mensajes más sutiles y complejos que los videos de corta duración consumidos en plataformas de internet, y además puedes disfrutarlos sin ningún tipo de distracción. Solo estás tú, la película y tus pensamientos: esta no es una experiencia que la juventud de hoy viva en el día a día, y es sorprendentemente útil cuando creces y tienes que enfrentarte a un mundo a menudo confuso.

El cine como catalizador

Cada Theme Cinema comienza con la proyección de una película que toca un tema relevante para la audiencia, seguida de un debate con invitados como expertos y periodistas, para acabar con un voto decisivo sobre el tema de la película. La película funciona tanto como catalizador de la conversación como un espacio seguro para la narración de la historia.

«Debatir sobre temas complicados en el cine en compañía de especialistas ofrece a los jóvenes cierta sensación de seguridad”, nos cuenta Robert. “Un tema complicado, debatido a través del análisis de una película que acabas de ver, te introduce delicadamente en una atmósfera relajada. Esto permite que los jóvenes interactúen y superen el miedo de ser juzgados por sus compañeros o profesores cuando tienen que hablar».

Parece que, después de todo, analizar películas interesantes hace que surjan temas interesantes y aptos para tratar con menores y, según Robert, a menudo es lo que más necesitan.

«Cuando invitamos a un adicto en rehabilitación, los jóvenes se interesan de corazón en sus experiencias”, nos cuenta. “Cuando debatimos sobre ecología, siempre surjen puntos de vista totalmente opuestos, y el debate entre los jóvenes y nuestos expertos siempre suele ser acalorado».

Theme Cinema comezó en 2013 y fue tan bien recibido que, dos años después, se añadió una versión para niños y niñas de entre 8 y 14 años: el Junior Theme Cinema. Cabe destacar que Helios diseñó este proyecto con la ayuda de colegios y profesores, utilizando además el apoyo de material de enseñanza proporcionado antes de la proyección.

Film Academy es un poquito más diferente. Los jóvenes pueden ver imágenes en movimiento completamente nuevas prácticamente en cada momento del día, pero pocos comprenden las técnicas que las hacen persuasivas e interesantes. Film Academy les enseña tanto el lenguaje cinematográfico como las formas en las que este aún funciona para así crear sus películas en sus propios smartphones. Se está demostrando que una mayor comprensión de las películas les puede llevar al amor por el cine hasta grados inimaginables.

«En marzo de 2023, en el cine de Helios en Radom, casi 2500 jóvenes compraron entradas para ver una película muda creada hace 100 años, ‘Nosferatu’ de Friedrich Wilhelm Murnau”, nos cuenta. “Puede que Murnau hiciera esta película en 1922, pero aún es capaz de llegarnos hoy en día. El director de esas salas, Andrzej Ciesielski, incluso consiguió llevar a los músicos polacos Marcin Dymiter y Michał Olewniczak para que tocaran en directo la banda sonora».

El cine no es irrelevante para las nuevas generaciones. Imposible, una vez que han podido ver de lo que es capaz.