Los entusiastas ocultos:
por qué funciona este negocio
Son las 3 de la madrugada y, en algún lugar sobrevolando el océano Atlántico, el pasajero del asiento 14B intenta ver una película que ya ha visto dos veces, pero su mente está en otra parte: en un par de maletines maltrechos con cientos de etiquetas. ¿Han llegado bien? ¿Los han tratado con delicadeza? ¿Sigue todo a salvo en su espacio acolchado especial?
«Relájate», se dice a sí mismo. «Lo has hecho bien, igual que cientos de veces antes. Eres bueno en tu trabajo, un AV Pro. Si se ha roto, puedes arreglarlo. Si se pierde, puedes volver a hacerlo».
Pero la duda le reconcome y pierde el hilo de la película.
Porque es un AV Pro,
Y su trabajo es pensar en estas cosas.
El arma secreta de ProAV
Bienvenidos al lado más discreto del entusiasmo: el lado oculto e inédito. Se encuentra en vuelos transatlánticos, en habitaciones de hotel y en estudios improvisados de todo el mundo. Está en la caja de herramientas de cada mecánico, en cada línea de código de mapping de proyección, en cada puntada de cada traje teatral y en cada proyector que Christie ha diseñado. El entusiasmo silencioso es el arma secreta de ProAV; es lo que hace que todos en este negocio se preocupen por su trabajo como lo hace el pasajero del asiento 14B.
Y lo más importante es que es acumulativo. Este negocio no depende de los empleados estrella, aunque los tenga y los celebre: el éxito de ProAV se basa en miles de actos individuales de dedicación entusiasta. En personas que siempre hacen un esfuerzo extra o trabajan una hora más, o doce, para terminar el trabajo y convertirlo en el mejor que han hecho nunca.
La bola de nieve empieza a rodar
En cierto momento de cada espectáculo y de cada evento, casi se puede sentir cómo la bola de nieve echa a rodar. No importa si han trabajado juntos antes o si acaban de conocerse: ese entusiasmo compartido por saber lo que se hace y hacerlo bien se ha convertido en un trabajo de equipo sin fisuras. ¿Y qué si no has dormido? ¿O si el código está corrompido? ¿O si vamos con retraso? Estás en camino y nada puede detenerte.
Muchos de los empleados de ProAV están tan acostumbrados a trabajar así, que probablemente ya no se den cuentan, pero ni por un segundo pensemos que todas las carreras son así, ni pensemos que no la echaremos de menos cuando termine. Trabajar con personas que comparten una misma perspectiva es un privilegio y un placer, pero no todo el mundo tiene la suerte de vivirlo. Claro que los resultados, la creatividad y la superación de los límites son emocionantes, pero lo más importante es sentirnos orgullosos de las personas que nos rodean y nos han ayudado a llegar hasta aquí.