El mundo ya no es el lugar acogedor que una vez fue y, mientras todos esperamos el regreso de las viejas certezas, tenemos que aceptar que algunas de las cosas se quedarán tal y como están ahora mismo. Todos hemos tenido o tendremos que cambiar de alguna manera, incluso aunque aún no sepamos exactamente el qué.

Siempre que el mundo se ha comportado de forma extraña y más allá de nuestra comprensión, la humanidad siempre ha intentado encontrarle una explicación, ya sea a través de la ciencia, la fe o el arte. De hecho, algunos de los proyectos culturales más interesantes de Christie y sus asociados se han visto envueltos en algo parecido, y se han encontrado a sí mismos explorando ciertas preguntas trascendentales que los seres humanos siempre nos hemos hecho.

Pensemos por un momento en los planetarios y en los lugares de culto. Aunque se trata de dos entornos totalmente distintos, ambos han abrazado las soluciones audiovisuales como parte de su exposición de complejas ideas, cada una en un ámbito completamente diferente.

Significado verdadero

El Sri Harmandir Sahib, o el Templo dorado, es el Gurdwara más sagrado del sijismo, y lo visitan más de cien mil personas al día. Pero, como en muchos otros lugares de culto, su significado, tanto cultural como spiritual e histórico, puede no estar totalmente claro para aquellos ajenos al culto que en él se profesa. ¿Por qué se encuentra a una altura inferior que el terreno que lo rodea, cuando las Iglesias normalmente se encuentran situadas en lugares elevados? ¿Por qué está rodeado de agua, y cuál es el significado de los tres árboles de Ziziphus mauritiana de 400 años de antigüedad?

Amardeep Behl, de Designhabit, nos dice que él cree que “una puesta en escena teatral funciona mejor” y que “hace destacar la historia y significado del sijismo de una manera dinámica y provocadora”, y añade que la intención del complejo sistema audiovisual que creó (manejado por Christie, por supuesto) en el sótano del templo era “educar e inspirar” en lugar de evangelizar.

Estas afirmaciones podrían fácilmente hacer referencia a cualquier planetario del mundo. Y, aparte de ser un sitio en el observar las estrellas con una mejor nitidez en una noche sin luna y sin contaminación que nos moleste, no hay un mejor lugar para sentarse y reflexionar sobre nuestro lugar en el universo. Pese a que su objetivo es muy distinto, su efecto es bastante similar.

Ciencia en un ambiente llamativo

En Nueva York, en la ribera del río Hudson y cerca de la Estatua de la Libertad (un monumento a los tiempos de cambio en sí mismo), se encuentra el Centro científico Liberty, uno de los planetarios impulsados por Christie que ofrece a su público algo más que pura ciencia: inspiración. Cuando te sientas allí, en la más absoluta oscuridad, y te dejas llevar más allá de la nebulosa de Orión, a más de 1375 años luz de distancia, no puedes sentir otra cosa. Bueno, quizá asombro al comprobar lo insignificantes que somos en este universo.

Relajación

Verse inmerso en una belleza tan apabullante, mucho más grande que nosotros, y que, además, no comprendemos del todo, puede tener cierto efecto relajante. Si piensas en la música o en cualquier forma artística y reflexionas sobre su efecto relajante, te darás cuenta de que este es tan poderoso como los sentimientos que te genera mientras la disfrutas.

Por lo tanto, si en una antigua iglesia reconvertida de Londres encuentras unos maravillosos interiores con un típico arte religioso, la sublime música de la Orquesta Sinfónica de Londres y una instalación audiovisual perfecta, es fácil que tengas las mismas sensaciones. Una alianza que puede hacer de este punto el lugar con más paz de una bulliciosa ciudad.

Al final, queda demostrado que, cuando esta situación termine, sea como sea, nuestra pasión por descubrir los secretos y diversiones que el universo nos ofrece no se habrá mitigado.