Cannes 2016. Mucho antes de que lleguen las estrellas.
Los nervios están a flor de piel mucho antes de que el primer actor pise la alfombra roja de Cannes 2016. Antes de que el festival cierre sus puertas, muchos habrán alcanzado la fama, años de duro trabajo quedarán sometidos a un juicio implacable y el orden global del estrellato se reajustará unos milímetros en el firmamento. Pero entre el ajetreo de celebridades y paparazzi, comentaristas y críticos, nos sorprende la actitud relajada de algunos.
Hablamos del equipo técnico de Christie, en el que Cannes ha depositado su confianza para garantizar que los pases de todas las salas funcionan sin tacha —una responsabilidad que pondría a prueba los nervios de cualquiera— y cuyos componentes, la víspera de la inauguración, habrán completado ya centenares de horas de duro trabajo y desempeñado su papel a la perfección.
Todas las grandes proyecciones
A esa tranquilidad ayuda el hecho de que Christie, con el valioso apoyo de la Commission Supérieure Technique De L’Image et du Son (CST), lleve ya diez años encargándose de todas las proyecciones de los espacios oficiales del festival.
Lo que no implica ni mucho menos, que el trabajo sea ahora más fácil o que se haya bajado el listón.
El trabajo arranca, en realidad, seis meses antes, a 6.500 kilómetros de distancia, en Kitchener, Ontario, donde se elabora la primera lista de equipamiento. Hay ahí suficientes productos hi-tech de Christie como para llenar tres camiones: un Proyector DLP de Cine Digital CP4230 y otro de repuesto para cada uno de los principales espacios de proyección, Proyectores DLP de Cine Digital CP2215 para todas las demás salas, y tres Proyectores DLP de Cine Digital CP4220 para los cines Bazin y Bunel.
La mayor concentración de proyectores de cine digital de toda Europa
Luego viene la operación logística, que tiene lugar en la Sede de Christie para EMEA de Wokingham, al oeste de Londres, convertida en campo temporal de pruebas y actividades y donde se reúne por vez primera todo el equipo. Lámparas, repuestos, kits de herramientas, cables… Todo se prueba una y otra vez para asegurar que funcionará a la perfección en el certamen cinematográfico más prestigioso del planeta. En el momento de cargar los camiones y prepararlos para la carretera, Wokingham se convierte en la mayor concentración de proyectores de cine digital de toda Europa.
Ahora sólo restan las doce horas de viaje hasta llegar a la Promenade de la Croisette, a las turquesas aguas del Mediterráneo, y dar comienzo a 21 jornadas de incansable trabajo, casi las veinticuatro horas del día.
Así le contaremos la historia
Pero esa historia se la contaremos en el próximo número de AVenue, donde acompañaremos al equipo en el comienzo de esa tarea crucial de instalar y poner a punto —y dentro del plazo fijado— cerca de cuarenta proyectores de cine digital, para que este año, como los anteriores, Christie llene a Cannes de orgullo.