Educación universal:
la odisea brasileña de Urânia hacia las estrellas
Visitar las estrellas no es más que un sueño, pero, ¿y si las estrellas pudieran visitarnos a nosotros? ¿No sería maravilloso? Pues bien, gracias a Urânia pueden, y lo hacen. Y para miles de escolares brasileños, la experiencia es mágica.
El secreto de este viaje interestelar a la inversa reside en una flota de planetarios hinchables de 7 metros equipados con proyectores 4K860-iS de Christie que llegan con audacia donde ningún planetario ha llegado antes. Atravesando Brasil, estos planetarios móviles convierten los patios de los colegios en sistemas solares, los gimnasios en galaxias, y a los escolares en astronautas.
Todo impulsado por una de las fuerzas más poderosas del universo: el entusiasmo de los niños. Tiago José da Silva, director general de Urânia, es todo un entusiasta: «La mayoría de nuestros seguidores en Instagram no son pedagogos, sino niños», afirma. «Tienen entre 13 y 15 años, y su pasión por las estrellas es increíble. Por eso, cuando un planetario de 360 grados aterriza inesperadamente en su colegio, es un gran acontecimiento, quizá el mayor de todos. Su entusiasmo se palpa incluso antes de que empiece el espectáculo».
Valor educativo
Cualquier profesor te dirá lo satisfactorio que es enseñar a niños comprometidos y entusiastas. Dado que son los profesores de los colegios quienes contratan los servicios de Urânia (y no los niños en Instagram), el valor educativo tiene que estar claro. No cabe duda de que existe una convergencia, ya que el objetivo principal de Urânia siempre ha sido primero la educación y después el entretenimiento. Se trata de difundir conocimientos y llevar la oportunidad de aprender y experimentar a lugares a los que de otro modo sería difícil llegar.
Viajes largos, preparación rápida
La tecnología entre bastidores es la clave para que todo esto ocurra. La estructura sintética de las cúpulas se adapta a las especificaciones de Urânia para que puedan inflarse en cuestión de minutos y todo se completa con los proyectores Christie 4K860-iS. «Son un componente esencial de nuestros planetarios móviles», afirma. «No solo son potentes, compactos y flexibles, sino también lo bastante resistentes como para soportar las exigentes condiciones de montaje y desmontaje diario y los rigores de la carretera. Su fiabilidad y facilidad de uso son cruciales».
Un millón de estudiantes
Tiago calcula que, desde el inicio del proyecto, Urania ha brindado a un millón de estudiantes la oportunidad de ver de cerca las maravillas del cosmos en Full HD y 4K.
Los alumnos, a menudo de escuelas rurales o urbanas céntricas, no suelen tener la oportunidad de visitar una instalación de planetario fija porque la distancia y el gasto son demasiado elevados. Es lo que impulsa el proyecto de Urania y lo que, en última instancia, hace que todas esas largas horas de viaje por carreteras rurales en un camión repleto de material merezcan la pena. Tal vez sea un tópico, pero las caritas embelesadas de los niños cuando comprenden por primera vez conceptos astronómicos complejos es una de las maravillas del universo.
A muchos de estos estudiantes, la visita a un planetario les parecía algo tan remoto como las propias estrellas y un imposible absoluto, pero Urania y los maestros de Brasil han demostrado que pocas cosas son imposibles en este universo cuando se pone todo el entusiasmo en hacerlas realidad.